Recomendaciones para evitar conflictos con el inquilino o comprador de tu plaza de garaje

Los conflictos son lamentablemente comunes en la relación del inquilino o comprador con el dueño del garaje. Usualmente, esto se debe a altercados que suceden durante el periodo de negociación que pueden evitarse si sigues unas simples recomendaciones.

Especifica las condiciones de compra o alquiler en un contrato

Es común que, por la confianza preexistente entre el dueño del inmueble y su cliente, se realicen acuerdos de palabra que no dejan claro las condiciones de la negociación. Algunos clientes toman ventaja de esta situación para pagar un monto inferior al acordado o retrasarse con los pagos.

A pesar de que como propietario puedes demandar si tienes las suficientes pruebas de que ese acuerdo sucedió, es mucho más fácil que todas las partes involucradas firmen un contrato. De esta manera, todos los involucrados podrán cubrirse las espaldas y tendrán un registro del acuerdo.

Si no sabes cómo hacer este tipo de contratos de venta o alquiler, te ofrecemos el modelo de contrato en nuestra web. Además, te invitamos a darte un paseo por nuestro catálogo de anuncios de garajes, para que estés informado de precios en tu zona y puedas negociar eficazmente.

Mantén una buena comunicación basada en el respeto

Durante las negociaciones con un cliente, se debe mantener un ambiente de respeto y cordialidad. También es importante mantener una vía de comunicación constante donde animemos al cliente a resolver sus dudas preguntándonos sobre el inmueble.

Es aconsejable no apresurar la venta ni presionar a los inquilinos a firmar el contrato. Sin embargo, podemos hacerles saber que estamos en negociaciones con otras personas interesadas, para que no existan problemas si las negociaciones son fructíferas con otros clientes.

Verifica los documentos del comprador

Es importante que hagas tratos de alquiler con personas que tengan solvencia económica o que evites algún fraude por parte de algún comprador. Para ello, debes comunicarle amablemente que debes hacer una pequeña entrevista en donde expondrá sus documentos como DNI o pasaporte.

Aquí puedes hacer indagaciones sobre cuál es su trabajo, sus razones para alquilar, etc… De esta manera te aseguras de que la persona con la que estás haciendo el trato tenga capacidad legal para hacerlo, con lo que no existirán problemas legales durante el proceso que puedan retrasarlo o cancelarlo, perdiendo tiempo y dinero.

Además, estarás corroborando que no se vaya a producir algún impago o que ocurran daños en la propiedad por no utilizarla para estacionar vehículos.

Graba el estado del garaje antes del trato

Es muy importante que realices una inspección con registro fotográfico o de video del garaje con el cliente antes de formalizar el proceso de alquiler. De esta manera puedes exigir el pago de cualquier daño estructural o material que aparezca en el mismo durante el alquiler.

De la misma forma, es importante que realices este registro antes de vender, pues se pueden suscitar batallas legales donde el comprador intenta estafar al vendedor cobrándole “daños preexistentes a la compra” en el garaje.

Se honesto con las condiciones y problemas del garaje

Si el garaje tiene problemas de funcionamiento de algún tipo, es importante que se lo comuniques a tu inquilino o comprador. No hacerlo puede acarrearte problemas legales, y a pesar de que puedes bajar el precio de la venta, es posible la asegures de esta manera.

Muchos inversores no tienen problemas de hacer reformas a tu garaje si el sitio de emplazamiento es bueno y el precio es justo. Sin embargo, tampoco tendrán inconvenientes en realizar una demanda por ocultar daños estructurales antes de la compra del garaje.

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